Foz do Iguaçu es una de las postales del país, eso gracias al espectáculo monumental de las 275 caídas de agua que forman las Cataratas de Iguaçu, distribuidas a lo largo de 2,7 km en la frontera entre Brasil y Argentina. Conservado como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco, es hábitat de distintas especies de aves, peces, mamíferos y mariposas. La mejor época para disfrutar las cataratas es el verano (diciembre a febrero), cuando las lluvias son rápidas y el volumen de agua es mayor. En Foz do Iguaçu no faltan opciones de paseo, como el Parque das Aves y el Marco das Três Fronteiras, cuyo comercio diverso y precios atractivos atraen la atención de los turistas.
Parque Nacional de Iguaçu y Complejo Turístico de Itaipú
Junto a las cataratas de Foz de Iguaçu, un paseo por una de las obras del ingenio humano se vuelve inolvidable. Una de las hidroeléctricas más grandes del mundo en generación de energía, Itaipú encanta a los turistas y ofrece diversos paseos alrededor de la planta para conocer, sentir y escuchar esta experiencia única.
